No, no voy a hablar de Libia. Me empieza a cansar este tema.
Quiero hablar de otra guerra, una guerra que estamos perdiendo. Una guerra de la que apenas se habla, y cuando se habla te tachan de antiguo.
Es una guerra con armas de todo tipo, con ejercitos, militares, soldados, propaganda, inocentes y culpables. Guerra de clases.
Los que nunca hemos renegado de este concepto (aunque en términos ortodoxos sea hable de lucha de clases) vemos hoy en día como se están quitando las caretas los distintos actores. No termino de tener muy claro en qué trinchera está cada uno. Lo que sí tengo claro es cual es mi trinchera, y pondría la mano en el fuego por algunos/as que considero que están conmigo.
Se que no estoy solo, y que en número somos más. Pero ellos/as están mejor organizados, tienen más medios y son capaces de desmovilizar y dividir a los míos.
Los/as de mi trinchera llevamos varias décadas perdiendo terreno. Una estrategia defensiva es muy difícil que te permita ganar. En mus se suele decir "jugador de chicas perdedor de mus".
Sun Tzu en "El arte de la guerra" venía a decir, entre otras muchas cosas, que la mejor victoria en una batalla es la que consigue que no haya batalla. Eso es lo que están consiguiendo hoy en día, que no demos batalla.
Estamos en un momento de clara debilidad de los míos. Tengo muy claros algunos motivos, pero evidentemente me faltan otros. Lo que tengo menos claro son las soluciones. Si no las diría. Pero lo que tengo claro como el agua es que, o abandonamos nuestros egos, individualidades e intereses inmediatos y nos ponemos a trabajar todos a una, o la derrota puede ser definitiva.
No quiero ser apocalíptico, nuestra derrota definitiva no será en las próximas décadas. Pero se pueden estar sentando las bases.
Toca sentarse - ahora, el mes que viene o dentro de un año - todos/as los/as que quieran estar en la misma trinchera que yo, y hablar.
Cada día que pasa sin que nos metamos todos/as en la misma trinchera y disparemos a nuestros/as verdaderos/as enemigos/as es un día que hemos perdido. ¿nos podemos permitir ese lujo? Yo no sé qué opinais, pero yo desde luego opino que no.
Este post es un llamamiento a la unión, a aparcar las diferencias, a luchar por objetivos comunes.
En el futuro, cuando estudien el momento actual, podrán decir que ganamos o perdimos. Lo que nunca deberían decir es que regalamos la victoria.
Os espero con el fusil cargado.
6 comentarios:
Cuenta con mi fusil, Don Viul
No se que coño he hecho con el anterior. Vamos,que me tutees,por amo de dior!!
Hombre viendo el parlamaento paralelo que se monta cada vez que las grandes empresas visitan a ZP nadie podrá decir que el concepto de lucha de clases está pasado de moda.
Un saludo
Más fusiles y más refundación de la Izquierda!!!
Totalmente de acuerdo contigo.
Mi Kalashnikov cargado aguarda en tu misma trinchera.
Un abrazo.
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