miércoles, 30 de marzo de 2011

Guerra

No, no voy a hablar de Libia. Me empieza a cansar este tema.

Quiero hablar de otra guerra, una guerra que estamos perdiendo. Una guerra de la que apenas se habla, y cuando se habla te tachan de antiguo.

Es una guerra con armas de todo tipo, con ejercitos, militares, soldados, propaganda, inocentes y culpables. Guerra de clases.

Los que nunca hemos renegado de este concepto (aunque en términos ortodoxos sea hable de lucha de clases) vemos hoy en día como se están quitando las caretas los distintos actores. No termino de tener muy claro en qué trinchera está cada uno. Lo que sí tengo claro es cual es mi trinchera, y pondría la mano en el fuego por algunos/as que considero que están conmigo.

Se que no estoy solo, y que en número somos más. Pero ellos/as están mejor organizados, tienen más medios y son capaces de desmovilizar y dividir a los míos.

Los/as de mi trinchera llevamos varias décadas perdiendo terreno. Una estrategia defensiva es muy difícil que te permita ganar. En mus se suele decir "jugador de chicas perdedor de mus".

Sun Tzu en "El arte de la guerra" venía a decir, entre otras muchas cosas, que la mejor victoria en una batalla es la que consigue que no haya batalla. Eso es lo que están consiguiendo hoy en día, que no demos batalla.

Estamos en un momento de clara debilidad de los míos. Tengo muy claros algunos motivos, pero evidentemente me faltan otros. Lo que tengo menos claro son las soluciones. Si no las diría. Pero lo que tengo claro como el agua es que, o abandonamos nuestros egos, individualidades e intereses inmediatos y nos ponemos a trabajar todos a una, o la derrota puede ser definitiva.

No quiero ser apocalíptico, nuestra derrota definitiva no será en las próximas décadas. Pero se pueden estar sentando las bases.

Toca sentarse - ahora, el mes que viene o dentro de un año - todos/as los/as que quieran estar en la misma trinchera que yo, y hablar.

Cada día que pasa sin que nos metamos todos/as en la misma trinchera y disparemos a nuestros/as verdaderos/as enemigos/as es un día que hemos perdido. ¿nos podemos permitir ese lujo? Yo no sé qué opinais, pero yo desde luego opino que no.

Este post es un llamamiento a la unión, a aparcar las diferencias, a luchar por objetivos comunes.

En el futuro, cuando estudien el momento actual, podrán decir que ganamos o perdimos. Lo que nunca deberían decir es que regalamos la victoria.

Os espero con el fusil cargado.


jueves, 24 de marzo de 2011

Palestina y Carabanchel

Ahora mismo tenemos una charla en Carabanchel sobre Palestina.

La semana que viene habrá otra en Chamberí, pero esta mola más. Mola tanto que la estamos tuiteando en directo. Los que querais seguirla desde vuestras casas o móviles: @

Libia y la izquierda.

Puede sonar a frívolo, y quizás lo sea, pero el debate que está surgiendo en la izquierda sobre la intervención en Libia es muy interesante. Y para mí, también esclarecedor.

Antes de nada quiero dejar claro mi por qué de la intervención de tropas internacionales en un conflicto local: aumentar la tasa de beneficios sobre un bien cada vez más escaso, el petroleo. Esto es, si bien es cierto que el actual gobierno de Gadafi es muy rentable para los gobiernos de distintos paises (aquí teneis una muy buena recopilación), siempre es posible encontrar a alguien que te aumente la dichosa tasa de beneficios. Ganar 100 está bien, pero si puedes ganar 150, mejor.

Por un lado, hay una parte minoritaria de la izquierda que aún se mantiene en defensa de Gadafi. Es residual y marginal, lo sé, pero ahí están. Su argumentación suele ser principalmente su oposición al imperio y una especie de "el enemigo de mi enemigo es mi amigo". Bueno, ni Gadafi es lo que en su día parecía que podía llegar a ser, ni el enemigo de mi enemigo es mi amigo. No apoyaría a Hitler para luchar contra Bush. Por otra parte se apoyan en una cosa que sí que creo que tiene razón; lo que están mintiendo los medios de comunicación en todo esto está siendo increible. Pero que los medios de comunicación mienta, no significa que Gadafi diga la verdad.

Por otro lado, hay una parte de la izquierda que, en esto, coincide con la derecha - y coincidir con la derecha en algo no te convierte en derechista - en que hay que intervenir Libia. Coincide por motivos distintos; si bien la derecha (ya sea Sarkozy-Merkel u Obama-Zapatero) lo que quiere es pillar cacho petrolifero, esta parte de la izquierda argumenta que no se puede mirar a otro lado cuando un dictador está masacrando a su pueblo.

Esta posición tiene dos elementos de los que discrepo absolutamente:

- El primero es el que el dictador Gadafi masacra a su pueblo. Esto es de una simpleza que asusta. En Libia lo que está ocurriendo no es ni más ni menos que una guerra civil. ¿Alguien recuerda quien disparó primero? ¿alguien cree que el pueblo armado puede derribar cazas y aviones con tecnología punta? ¿pueden unos rebeldes por sí mismos ganar militarmente casi el 30% de un territorio contra un ejercito tan bien armado y formado como el Libio?
Es decir, ¿nadie ve la diferencia entre los manifestantes que tiraban piedras en la plaza Tahrir y caían como moscas, y los rebeldes que son capaces de tirar aviones militares?

Todavía es pronto para saber la verdad, pero todo parece apuntar que "los Rebeldes" no son unos románticos que luchan por la igualdad.
Dentro de su amplísima heterogeneidad, al parecer, ya hay muchas voces que están diciendo que la mayoría que dirige a ese amplio grupo, está siendo financiado directamente por amplios sectores monárquicos, que lo que pretenden es restaurar la fallida y breve monarquía del rey Idris I, que terminó por la fuerza con la llegada de Gadafi. Todo hace suponer que la llegada de este sector al poder, comenzaría un rápido proceso de privatización de las empresas públicas petroleras.

Esto es lo que está ocurriendo en Libia, una lucha por el control del petroleo. Y ambos bandos, los que manejan el cotarro actualmente, y los que antes lo manejaban y quieren volver a hacerlo, están utilizando al pueblo libio como escudo humano y como excusa. Y lo que estamos haciendo es tomar partido por una de las partes del conflicto. Parte que, hasta la fecha, no ha demostrado que vaya a ser mejor que Gadafi.

Todo muy sibilino, ya que no se está apoyando directamente a los rebeldes, si no que lo que se está haciendo es debilitar al actual gobierno. Yo supongo que todo irá por cierto camino de debilitamiento de Gadafi para que sean los rebeldes los que den el toque de gracia y todo el mundo esté contento. Nadie podrá decir que la OTAN o la ONU apoyó a los sublevados, porque nunca habrá ataque conjunto ni nada de eso. Pero dejarán a Gadafi tan debil, que los rebeldes podrán ganar sin problemas.

- No se puede mirar a otro lado cuando hay atropellos de los derechos humanos. Tócate los pies José Andrés. ¿Desde cuando esas voces que ahora piden intervenciones militares en defensa de los derechos humanos han pedido la intervención militar en Marruecos, Sudan, China o un largo etcetera? ¿Es que hay diferencias entre unos y otros? Por llevarlo al extremo, la nada sospechosa de izquierdista Aministia internacional, en sus informes anuales siempre ha dicho que en España no se respetan los derechos humanos. ¿O es que ese argumento solo vale para unos sí y para otros no?.

Dicho esto, por suerte hay una parte de la izquierda, la parte mayoritaria y que ejerce la síntesis de este debate, que apuesta por la paz. Que está en contra de la dictadura y de los bombardeos. Supongo, al menos en lo que a mi respecta, que es por una apuesta decidida por la vida. Cada vez que la OTAN o la ONU ha mandado soldados a una zona han muerto inocentes. Como decía alguien en algún lado, la solución a las bombas, no son más bombas.

Y esto no es mirar a otro lado, es simplemente no apostar por un mal menor. Entre Bush o Hitler, yo no me quedaría con el primero por es un mal menor, yo apostaría por un Evo Morales. Yo puedo elegir entre el mal menor cuando no hay más opciones, pero habiéndolas, ¿Por qué conformarme con el menos malo?.

Como ha dicho Hugo en algún sitio, yo tampoco tengo la solución a la situación actual ni varitas mágicas. Pero si hay que apostar por algo, yo lo haría por aquellos que apuestan por una posición democrática y pacífica.

Y esto, no es cruzarse de brazos, es mantener una posición muy firme y muy incomoda.

martes, 22 de marzo de 2011

Vuelvo

He estado sin escribir durante un mes y medio. No ha sido voluntario, si no que me ha obligado mi empresa proveedora de conexión a internet. Y tenía pensado hacer un relato gracioso, todo lo gracioso que me puede salir a mi un relato. Pero han pasado tantas cosas en este periodo, que haciendo un breve balance mental de los temas que podría tocar en estos días, me ha entrado tal mala leche, que se me han quitado las ganas.

Supongo que lo dejaré para otro momento, porque en serio, lo que me ha pasado es para mear y no echar gota. Pero ahora retomo como si no hubiese pasado nada.

Así que antes de nada, por ir calentando motores, me voy a ir cagando en el Zapatero pacifista. Aquel del no a la guerra que tanto recuerda al OTAN de entrada no.

Este PSOE cada vez da más asco.

Os dejo un video que me ha gustado bastante:


Y ya de paso os informo, por si no lo sabía alguien, que si quereis seguirme en twitter, ando ahí bastante activo: @viul_abloguear

Ya iré escribendo de manera un poco más serena.

Ah, me cago en ZP.